Japa con una Mala
Deseo tratar un aspecto importante del japa yoga: el manejo de la mala. Mucha gente piensa que poco importa sostener la mala con la mano izquierda o con la derecha; la mala puede sostenerse de cualquier forma porque es el nombre de Dios lo que se recita. Sin embargo, esto no es correcto. Aunque en algunos casos sí se repite el nombre del Señor, aquí estamos hablando simplemente de mantra japa, no de una práctica religiosa. De acuerdo con el yoga, el propósito de practicar japa con la mala es despertar la conciencia psíquica en un individuo normal.
Por supuesto, para aquellos que sólo recitan el nombre del Señor, no existe regla alguna en cuanto al uso de la mala. Pueden sujetar la mala de cualquier forma. Pueden practicar con 101 cuentas, 2.001 cuentas o con 50 cuentas, como quieran, pero si están practicando japa para el despertar de la conciencia, que es el propósito del yoga, entonces tienen que observar ciertas restricciones y seguir ciertos métodos para impresionar o influenciar la estructura psíquica.
Por qué utilizamos una mala
A muchas personas les gustaría saber por qué es necesario utilizar una mala. Aunque el japa sea una práctica para desarrollar la conciencia psíquica, podría hacerse sin ella. El uso de una mala no despierta la conciencia psíquica, así que ¿por qué debería utilizarla? Estoy totalmente de acuerdo que la conciencia psíquica es algo muy distinto de la mala y que esta se puede despertar, aunque no se tenga. El problema está en la psique humana, no permanece estable durante mucho tiempo.
Por lo tanto, se hace necesario elegir algún medio o base a través del cual se pueda saber dónde ha habido una interrupción o dónde se ha fallado. Con el fin de introducir un sistema para comprobar y detectar esos momentos en los que la mente se ausenta, y también para conocer el propio progreso, se ideó el método de japa con una mala.
En una determinada fase del japa, cuando su mente se vuelve tranquila, sosegada y serena, surge un estado en el que los dedos pueden permanecer inertes, como si se paralizaran momentáneamente. Uno está tranquilo y se olvida de sí mismo. A veces la mala también se cae y entonces se sabe que se ha perdido la conexión. Si la mala no está girando cuando llega ese estado, ¿cómo lo sabrá? Tendrá la impresión de que ha experimentado un estado espiritual elevado cuando en realidad ha entrado en laya.
Una tarde me ocurrió eso. A las seis me senté en padmasana a meditar. En unos instantes perdí el conocimiento y permanecí inerte en la postura hasta las cuatro de la mañana del día siguiente. Cuando me levanté estaba muy satisfecho de mi logro, excepto porque tenía un dolor terrible en las rodillas y los muslos. Fui directamente a ver a mi gurú y le dije: «Swamiji, acabo de sentarme durante diez horas en samadhi.» Se rió y dijo: «Eso está muy bien.», sin embargo, no me estimuló. Más tarde Swamiji me preguntó si practicaba japa y si tenía una mala. Le dije: «No». Me preguntó. “¿Qué pasó con la mala que te di?.» Le dije: «Bueno, en realidad no creo en malas.»
Él replicó: Puedes creer o no, eso es una cuestión intelectual, pero no es una cuestión de creencia, es una cuestión de necesidad; cuando tu mente es oscilante, tu psique es oscilante. Aquella noche en que estuviste sentado durante diez horas, ¿estás seguro de que tu conciencia estaba intacta o se quedó en blanco?». Le dije: «No lo sé». Él dijo: «Debe haber algún método para comprobarlo, para saberlo, para detectarlo.»
Pregunté: «¿Qué método se podría utilizar porque a esa profundidad de conciencia no es posible recordar nada?» Respondió: «Es la continuidad del japa con una mala lo que te lo dirá; durante toda la práctica este dedo y este otro se moverán, luego tu consciencia estará intacta.”
Por eso se dice: «Cuando el japa transcurre correctamente y tiene lugar la concentración, entonces la mala se moverá sin cesar.» No voy a entrar en más detalles sobre esto, sólo diré una cosa, que la mala puede no ser algo que su mente pueda aceptar, pero es algo que su mente requiere.
El número de cuentas
Para el japa siempre utilizamos una mala que tiene 108 cuentas. El número de cuentas requiere alguna explicación. En primer lugar, le diré lo que he oído y lo que he leído en los libros. El número 108 fue seleccionado de la siguiente manera. El número uno representa la Conciencia Suprema; el cero representa el cosmos, todas las galaxias de la creación, y el ocho representa los óctuples aspectos de la naturaleza física, puede llamarla la física.
Luego hay otros pensadores que dicen que esta cifra es la suma total de las adiciones matemáticas de la palabra «Brahma». Según el sánscrito, la palabra Brahma se compone de cuatro sílabas: Ba – 23, Ra – 27, Ha – 33, Ma – 25, y la suma total es 108. Hay otros estudiosos que creen que se eligió 108 porque representa el número de calaveras de la guirnalda de Kali. Esto significa que 108 denota 108 encarnaciones. Hay muchas más explicaciones dadas en diferentes libros y en diferentes religiones.
El número de cuentas fijado para la mala es 108 y la última cuenta se llama sumeru. Por el momento, la mala puede considerarse como el paso de la conciencia y el sumeru como el bindu. Estas 108 cuentas son los centros o estaciones a través de los cuales su conciencia va saltando y brincando hasta el bindu. Desde el bindu se regresa, no se cruza el bindu. Cuando se llega a este punto, se completa una rotación del pasaje psíquico, entonces simplemente se invierte el mala y se continúa. Así que las cuentas nunca se mueven en un círculo continuo. El círculo se rompe con cada vuelta.
Este esquema particular se ideó para que la conciencia se reavivara y no perdiera el contacto con el tema principal. Si la mente se ausenta de algún modo y usted no se da cuenta en ese momento, entonces, cuando tenga que invertir la mala y todo el proceso, recordará: «Oh, sí, he perdido la conciencia.» Normalmente, cuando se empieza a girar la mala, se está bien hasta diez cuentas. Después de diez cuentas la mente empieza a oscilar y los dedos siguen automáticamente. Entonces, cuando llega la última cuenta, la conciencia se ve obligada a reanimarse, de lo contrario habrá algún error en el conteo.
Movimiento de las cuentas
En el japa hay una forma particular de mover las cuentas en la que sólo se utilizan tres dedos: el pulgar, el tercero y el cuarto. Separe los dedos tercero y cuarto y coloque el mala entre ellos. A continuación, gire las cuentas utilizando el pulgar y el tercer dedo. Es muy sencillo. Puede practicar con la mala sostenida cerca del corazón, pero normalmente la mala se vuelve pesada. Para los que practican varias malas, es necesario algún apoyo para que la pesadez no se note en los dedos. En este caso, no se apoya la mala con la mano contraria, se utiliza un cierto tipo de bolsa de tela conocida como gomukhi.
Para practicar japa con la mala durante cualquier periodo de tiempo, se recomienda el uso de un gomukhi. Un gomukhi está hecho de tela en forma de ángulo recto. La mano va dentro y hace girar la mala que se apoya en la parte inferior de la tela. El gomukhi es muy ligero y facilita la práctica del japa. Lo utilizan quienes hacen anushthana, practicando hasta 50.000 o 60.000 repeticiones al día. Para ellos es imprescindible.
Modificación del flujo respiratorio
Para quienes practican muchas malas a diario, el yoga también es imprescindible. Cuando uno se sienta y practica muchas rondas de japa, el flujo de las nadis cambia a causa de ciertas alteraciones que se producen en el cuerpo. Por lo tanto, el yoga se utiliza para equilibrar el flujo de las nadis. Cuando practique japa, la fosa nasal izquierda debe estar siempre fluyendo. Si ambas fosas nasales fluyen está bien, pero la fosa nasal izquierda debe fluir predominantemente. Si la fosa nasal izquierda está cerrada y la derecha fluye, entonces tiene que utilizar un método para cambiar el flujo de la nadi. Este es el tema del swara yoga, la ciencia de despertar el conocimiento psíquico a través de la conciencia de la respiración. Antes de comenzar la práctica del japa, si la fosa nasal derecha fluye y la izquierda no, puede cambiar el flujo colocando la mano izquierda bajo la axila derecha durante unos quince minutos hasta que la fosa nasal izquierda comience a fluir.
Importancia de la soledad
Si el japa se practica de forma incorrecta, puede tener efectos adversos en la psique. En primer lugar, la práctica del japa no se debe hacer delante de nadie, especialmente de un no practicante. Es diferente si cinco o diez personas están sentadas juntas en una habitación y todas ellas son practicantes; entonces se puede hacer así. Sin embargo, si uno de los miembros de su familia no lo aprueba y usted sigue practicando delante de él, puede ser muy perturbador tanto para usted como para él. El japa no es una práctica que pueda ser comprendida por personas intelectuales, por lo que se debe practicar en absoluta reclusión. Es una ley natural, que cuando los actos psíquicos se realizan ante los demás, pierden su poder, por lo tanto, la regla siempre ha sido que el japa se deba realizar en absoluto secreto y no como un espectáculo. Ese es un error común en el japa.
Un gurú, un mantra
Cambiar el mantra es el segundo error en el japa. Supongamos que usted me ha pedido un mantra y ha podido desarrollarlo hasta cierto punto, pero no completamente, porque yo no pude explicarle toda la práctica. Entonces, usted busca a otra persona que sea más capaz de despertar ese mantra y de darle instrucciones más detalladas al respecto. Puede buscar su ayuda, pero no debe cambiar el mantra. En el momento en que cambie el mantra creará confusión en su mente inconsciente y, una vez creada, esa confusión nunca podrá corregirse. Por eso hay instrucciones estrictas de que nunca debe cambiar de gurú ni de mantra. Estos dos se convierten en símbolos de su conciencia y cualquier cambio en ellos es un indicativo de confusión.
A veces ocurre que se le ha dado un mantra, pero usted siente que otro mantra sería más poderoso, y su mantra es menos poderoso. Algunas personas se sienten así y, subconsciente o inconscientemente, intentan conseguir otro mantra. Eso no se debe hacer. El mantra se debe seleccionar con sumo cuidado, fe absoluta y decisión final. La fe debe estar ahí, pero hay que decirle a la mente: «Voy a tomar una decisión final y después, aunque no me guste este mantra, no voy a cambiarlo.»
Este es un importante error en el japa y mucha gente lo ha estado cometiendo. La gente cambia tantas cosas; cambian de secta, de comunidad, de religión, pero no saben lo que están cambiando. Están cambiando toda la estructura de la mente inconsciente y creando así mucha confusión en su psique, no sólo en esta vida, sino también en el más allá.
Por lo tanto, el mantra no se debe cambiar. Sea cual sea el mantra que tenga, ya sea un mantra sánscrito, un mantra latino o cualquier mantra, con o sin significado, por favor, siga con él. Si en algún momento desea comprender un poco más sobre él o si quiere que se añada algo a su práctica, entonces debe acudir a esa persona que le ayudará a desplegar su conocimiento sin cambiar el mantra. Este es el segundo error en el japa.
No se exceda
El tercer error que cometen muchas personas es exagerar la práctica. Están tan entusiasmados con ella y piensan que es el método más fácil y mejor para lograr la autorrealización, así que hacen miles y miles de repeticiones diarias hasta que su mente acaba por estropearse o se vuelve introvertida y embotada. Por lo tanto, es muy importante no abusar de la práctica. Usted sabe muy bien que cualquier medicamento potente no debe tomarse por encima de la dosis prescrita. Del mismo modo, si cree que su mantra es poderoso, no debe practicarlo indiscriminadamente. Por eso, el día que el gurú da la iniciación, prescribe el límite máximo.
En el momento de mi iniciación, mi gurú me dijo que hiciera cinco malas después de salir de la cama, cinco malas al acostarme, cinco malas después de comer y cinco malas después de cenar, pero ya saben, a mí cinco malas sólo me llevan tres minutos. Me preguntaba por qué Swamiji me había prescrito todas estas prácticas tan cortas. Pensaba que debía practicar media hora, una hora, dos horas, tres horas, pero me dijo: «No faltes a la práctica ni siquiera un día y entonces te aseguro que algo sucederá.»
Así que solía hacer la práctica por la mañana, después de comer, después de cenar y cuando me iba a la cama. Ahora estos doce minutos de cada veinticuatro horas han entrenado mi psique, han establecido una rotación particular en el movimiento, y estoy tan acostumbrado a ello que mis veinticuatro horas están cronometradas según esos momentos particulares; no puedo evitarlo. A esto se le llama disciplinar la psique. Del mismo modo, en el japa lo más importante no es la cantidad, ni siquiera la calidad, sino la regularidad de la práctica. Los que buscan la cantidad realizan muchos miles de repeticiones. No estoy desalentando esto, pero a menudo se vuelven aburridos e introvertidos y a veces se produce una sensación involuntaria de desmayo y entonces tienen que abandonar la práctica. Estarán sentados y la mente empieza a desfallecer. ¿Por qué? Este mes y el mes pasado, entre las doce y las cuatro, estuve haciendo miles de repeticiones de mantras y luego lo dejé. Ahora, exactamente durante ese periodo, mi mente empieza a desmayarse. Eso se convierte en la condición del sistema nervioso. Así que se dice que usted debe tratar de entrenar su sistema nervioso gradualmente. Excederse en el nuevo entusiasmo es uno de los errores en el japa yoga.
Uso de la mala
La mala destinada al japa nunca se debe llevar puesta ni colocarse alrededor del cuello. La mala para llevar puesta y la mala para la japa son dos malas diferentes. No preste a nadie su mala. No es en absoluto necesario llevar la mala aunque llevar la mala es bueno, pero prestar la mala o pedir prestada una mala no es bueno. Si un día no tiene mala, debe empezar a contar con los dedos.
Según el método de la japa sadhana, especialmente en la sadhana tántrica, en el momento en que se rompe una de las cuentas, no se le permite usar la mala. Esto tiene muchas referencias en el tantra shastra. Así que no utilicen la mala cuando una de las cuentas esté rota. Dicen que se ha vuelto inútil. ¿Entonces qué hacen? Siempre llevan consigo una mala de repuesto y esa mala se utiliza. La otra mala se desecha. En la India sólo tiramos la mala al Ganges. Nunca se tira en cualquier sitio.
Pronunciación del mantra
Por último, quienes deseen practicar el japa con un propósito específico, deben cuidar siempre la pronunciación. La pronunciación correcta del mantra podrá crear las figuras de pensamiento en su interior. En lugar de recitar Om Namah Shivaya, si dice Om Namay Shivaya u Om Namah Shivaye, el sonido cambia y, por tanto, las imágenes también deben cambiar. Para que estas imágenes sigan siendo las mismas en todo momento, es necesario que la pronunciación del mantra sea correcta.
No sólo la pronunciación gramatical, sino también la pronunciación psíquica debe ser correcta. En los Vedas hay dos tipos de pronunciación que voy a explicar en pocas palabras. En la pronunciación gramatical, lo importante es el acento, y en la pronunciación psíquica, el tono en relación con el chakra. En lo que respecta al mantra, la pronunciación psíquica debe ser perfecta.
Si sólo la articulación gramatical es correcta, y la articulación psíquica no lo es, dicen que el mantra no producirá en su interior la forma y el efecto deseados. Podré hablarle más sobre esta pronunciación psíquica al final de su estudio del sánscrito, ya que es algo que se debe aprender y no sólo oírse.
Por lo tanto, quienes quieran escoger un mantra para el japa de un gurú inexperto, deben tener mucho cuidado con la selección. También se dice que los mantras seleccionados de un libro o cualquier texto antiguo son tan peligrosos para el practicante como una flecha envenenada para el cuerpo. Con esto he concluido prácticamente el tema del japa yoga, excepto en lo que respecta a escribir algunos mantras para su información.
Tomado del libro Early Teachings, Volumen I, página 132 a 140